Musulmán se convierte después de matar a cristianos “Me impresioné cuando vi que oraba”

“Yo era riguroso en seguir rituales y culturas islámicas. Crecí odiando gente de otras religiones “, confiesa Peter (nombre usado para proteger su identidad).
Cuando supo que un joven musulmán de su región se convirtió al cristianismo, Peter reunió a siete amigos para “dar una lección” en el apóstata. La víctima fue agredida hasta la muerte por el grupo.
“Me sorprendió cuando vi que empezó a orar antes de morir”, dijo Peter, que todavía recuerda las palabras de la oración del muchacho: “Señor Jesús, yo entrego mi vida en tus manos. Gracias por darme un lugar en el cielo, pero muéstrale a ellos tu amor, tu perdón y tu salvación”.

Los musulmanes se rieron de las palabras del joven cristiano y escupieron en su cadáver. “La gente creía que iba al infierno como un infiel. Los líderes de nuestra mezquita elogiaron nuestra acción, pero la policía nos prendió aquella noche “, recuerda Peter.
Un día, misioneros de la organización Bibles for Mideast visitaron la prisión y promovieron una reunión donde el Pastor Paul, director del ministerio, compartió su testimonio de conversión del Islam al cristianismo.
Cuando el encuentro terminó, Peter y sus amigos se acercaron al pastor Paul y hablaron de su crimen. Con lágrimas en los ojos, Paul reveló que la víctima era uno de sus mejores amigos. Sin embargo, aprovechó el emocionante momento para evangelizar a los asesinos.

“Ustedes también pueden ir al cielo si reconocen a Jesucristo como Señor y Salvador”, dijo Paul, que pronto vio a los tres criminales aceptar la invitación. Esa misma noche, Peter vio a Jesús en sueño.
“Yo soy la luz del mundo. El que entra en mi luz no permanece en la oscuridad. Me siga y seguramente será libre. Él me tocó con las manos clavadas y luego desapareció “, recuerda Peter con admiración. Los otros dos hombres tuvieron experiencias parecidas en aquella noche.

Días después, milagrosamente, el tribunal decidió liberar a los tres hombres. “Fue absolutamente un milagro. Nunca pensamos que estaríamos fuera de la cárcel. De hecho, Jesús nos liberó “, Peter reconoce.
Nueve años después, Peter se convirtió en un hombre casado y padre de dos hijos. Él actúa como evangelista y lidera la organización Asamblea de Dios Amoroso. “Nosotros sufrimos muchas persecuciones, pero Jesús nos fortaleció a través de las oraciones de los hijos de Dios”, dijo.